Dimite el concejal de Bienestar social, Luis Gil, por desavenencias en la destitución de la coordinadora del Centro de Acción Social de la villa. La Ejecutiva local del PSOE y el Grupo Municipal Socialista convocan una reunión conjunta para “examinar” las declaraciones públicas efectuadas por el edil

másMedina.— Esta mañana ha presentado su dimisión el concejal de Bienestar Social de Medina del Campo, Luis Gil, por estar en desacuerdo en la destitución de la coordinadora del Centro de Acción Social de la villa (CEAS), y de cómo se ha llevado a cabo su proceso de sustitución. Así lo ha manifestado en una rueda de prensa en la que ha asegurado que su renuncia es “irrevocable” y ha subrayado que se trata de una “decisión personal”.

El edil socialista presentó en el Registro sendas cartas dirigidas al secretario municipal y la alcaldesa, en las que les comunica su renuncia, pues no comparte “las formas con las que se ha realizado el cambio de coordinadora del Centro de Acción Social”, según ha explicado.

El Grupo de Gobierno de Medina del Campo se ha apresurado a emitir una nota de prensa en la que anuncia que “examinará” conjuntamente con la Asamblea Local del partido el contenido de las declaraciones vertidas por Luis Gil, y que el próximo miércoles realizará una declaración pública.

Las declaraciones de rechazo a la actuación del Grupo de Gobierno no se han hecho esperar entre numerosos vecinos de la villa, así como las manifestaciones de apoyo al edil dimisionario. Muestra de ello está en el contenido de los foros abiertos en la red, que valoran la actuación de un concejal que trabajaba con “dedicación” a su pueblo “sin cobrar por ello ningún sueldo”.

También critican la destitución de la anterior coordinadora del CEAS, que ha sido relegada de unas funciones “que venía ejerciendo con responsabilidad, seriedad y eficacia desde hace casi 30 años, sin otra justificacion que un cambio organizativo”. En su lugar han colocado, según las mismas fuentes, a una “amiga de la alcaldesa y simpatizante del PSOE, que estaba previamente contratada como “animadora comunitaria”.

Con la dimisión de Luis Gil se abre la primera brecha en el complicado Grupo de Gobierno que rige la villa en minoría, con el apoyo del único edil independiente y los dos votos de Izquierda Unida. El Ejecutivo local se compone de 8 ediles del PSOE y uno de PCAL-CI, que suman sus sufragios a los dos votos de IU. En total, esta especie de «tripartito» controla 11 escaños contra los 10 obtenidos por el Partido Popular en la últimas elecciones municipales.