Números

Cuántos motivos trascendentes nos evocan las desnudas cifras. Quizá la razón más arcana se encuentra en el libro de «Números», cuarto de la Biblia tras Génesis, Éxodo y Levítico. Precursor del Deuteronomio, último del Pentateúco que escribiera, según la tradición, el sabio profeta Moisés en el segundo milenio antes de Cristo.

Hoy en día, por todo aquello de la laicidad que está tan de moda, podría ser más adecuado llamar a la curiosidad del lector con otros números mundialmente famosos: aquellos que, a partir del capítulo 18, fueron toda una línea argumental de la célebre serie «Lost». Éstos eran, para quien no lo recuerde, y por abundar más en el universo matemático: 4, 8, 15, 16, 23 y 42.

Pero esta semana los protagonistas serán otros números que nos parece conveniente sacar a la palestra, poner en primera línea. Junto a otros que aún no sabemos y que pronto nacerán como una nueva creación, provocarán ríos de tinta y llenarán las ondas de los medios de comunicación de Medina del Campo. Atención. Esos guarismos son:

Serie 1: 13.277, 6.313, 6.042.

Serie 2: 11.481, 4.673, 3.712.

Quizá los más sagaces puedan adivinar en este punto de qué estamos hablando. Para los menos será conveniente aclarar que la primera serie se refiere a las elecciones generales de marzo de 2008, en concreto los resultados al Congreso de los Diputados obtenidos en el municipio de Medina del Campo. La primera cifra es el número total de votos; la segunda los sufragios que obtuvo el partido ganador, el PSOE. La tercera, los sufragios que obtuvo el PP.

La segunda serie se refiere a las últimas elecciones municipales de mayo de 2011. El número de votos totales en la Villa de las Ferias descendió hasta esa primera cifra. La segunda corresponde a los sufragios del partido ganador, aunque a la postre no gobernante; la tercera al segundo partido más votado, el PSOE.

Apúntelo en un papel quien no lo tenga preparado todavía, con un espacio en blanco al lado para rellenar el próximo domingo. Las diferencias serán motivo de mil especulaciones. ¿Se contabilizarán más o menos votos totales? ¿Cuántos sufragios ganarán o perderán los partidos? Las variaciones… ¿serán extrapolables a la política municipal o sólo a las corrientes dominantes en el ámbito nacional?

Por ahora es mejor prepararse para votar. Las especulaciones vendrán después de lo que pase -ya veremos- el próximo domingo.