Llega al Museo de las Ferias su primera letra de cambio

Sánchez del Barrio, Esperanza Lorenzo, Crescencio Martín Pascual y Rafael Berrocal en el Museo de las Ferias, durante la presentación del documento.Los propietarios de la librería madrileña Berrocal, medinenses, donaron del documento a la villa

másMedina.- El Museo de las Ferias de Medina del Campo ha incluido en su exposición permanente su primera letra de cambio, donada por el matrimonio formado por Esperanza Lorenzo y Rafael Berrocal, medinenses afincados en Madrid y propietarios de la popular librería Berrocal.
La letra está datada del año 1672, “muy tardía” según el Director del Museo de las Ferias, Antonio Sánchez del Barrio, ya que en esas fechas las históricas ferias de Medina del Campo habían entrado en declive y no se conocía material sobre esas fechas relacionado con el comercio en la villa.

Sánchez del Barrio mostró su satisfacción por la donación, ya que “hasta ahora teníamos que pedir prestadas todas las letras que hemos expuesto”. La letra de cambio, que será ‘pieza del mes de febrero’, estará expuesta junto al Libro de Acuerdos del Concejo de 1672, “en el que figura el acta del ‘cuento’ o reunión de mercaderes que fija el precio de los cambios para la feria correspondiente de diciembre”, apuntó Fernando Romero, técnico del Museo de las Ferias.

Rafael Berrocal asegura que “siempre” ha sido “un estudioso de las letras de cambio” y tras muchos años de documentación decidió intentar hacerse con algunas de ellas, entre las cuales se encuentra esta letra valenciana girada a la villa. “En un momento determinado mi esposa y yo nos preguntamos, ¿por qué no se la damos a Medina?”. Según contó el propio Berrocal, “la letra estuvo perdida durante un año” ya que, tras meterla en un sobre, se extravió y sus propietarios pensaron que se la “habían regalado a alguien por equivocación”.

La letra de cambio que desde ayer se puede observar en el museo, corresponde a una época difícil para las ferias de Medina del Campo, ya que años antes, en torno a 1604 y tras una primera desaparición, se habían relanzado creando cuatro ferias anuales de 25 días cada una. “Antes de eso se celebraban 2 ferias de 50 días cada una al año”, explicó Fernando Ramos. En esas épocas, los hombres de negocios ya no eran del rango de años anteriores, y además fueron abandonando poco a poco Medina del Campo debido a que el Silgo XVII tampoco fue una centuria fructífera económicamente. Sin embargo “la fecha tan tardía de esta letra evidencia la importancia aún de Medina del Campo en el mercado financiero, apenas treinta y tres años antes de la definitiva desaparición de las ferias históricas medinenses”, apuntó Romero. Y además, dan por hecho otro asunto histórico-económico: la importancia de las contrataciones desde el Reino de Valencia, lugar natural de la letra. En concreto, pertenecía a Gaspar Jordá, un financiero de Játiva que poseía el monopolio del cambismo en el Levante y que un tercio de cuyos beneficios iban a parar a las arcas de la Casa Real.
En concreto la letra consiste en los pagos correspondientes a la feria del mes de diciembre, en la que se cambian 75 castellanos, moneda utilizada en la villa en esos momentos en la villa, por 100 libras valencianas. Cada castellano equivalía a la cantidad de 485 maravedís.

V Centenario de la imprenta

Lo que le ocurrió al matrimonio Berrocal Lorenzo –el perder el documento durante más de un año- “es normal”, aseguró el marido, ya que son muchos los documentos de Medina que tienen en su propio domicilio. “Soy el papelero de Medina”, bromeó. Entre todos esos ‘papeles’ que poseen existe una colección de libros que constituyen los primeros que se imprimieron en Medina del Campo allá por inicios del siglo XVI. Precisamente, el año 2011 se cumplirá el V centenario de la aparición de la imprenta en Medina, y los propietarios de la librería ‘Berrocal’ prestarán muchos de sus libros para que se expongan en el Museo de las Ferias en la futura conmemoración. “Cuando entré en esa biblioteca me recordó a la película ‘El nombre de la rosa’, era inmensa”, apuntó Antonio Sánchez del Barrio. “Seguramente sea la mejor biblioteca de impresos del siglo XVI”, añadió.

Los donantes de la Letra de Cambio tuvieron en su poder el primer libro impreso en Medina del Campo, en el año 1511. “Se lo vendimos a la Junta de Castilla y León con la condición de que se expusiera en Medina del Campo”, aseguró Rafael Berrocal, que dijo que en su portada aparecía “el escudo imperial de Carlos V y trataba sobre la legislación relacionada con Castilla, León y Burgos”. El propio Rafael Berrocal posee “una tesis doctoral” sobre las ferias de Medina, escrita por unos autores desconocidos, que aporta “nuevos datos” sobre aquellos tiempos y que “supera” a la obra de los historiadores  Cristóbal Espejo y  Julián Paz, los estudiosos de las ferias más reconocidos. “Habrá que publicarlo”, sentenció Berrocal.